El acuerdo firmado con los rusos exime de responsabilidad al laboratorio por las demoras con las vacunas
La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, descartó eventuales sanciones o litigios legales porque se incumplieron los plazos previstos inicialmente para el envío de dosis de la Sputnik V

La secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, descartó eventuales multas o acciones legales contra el Centro Gamaleya por los retrasos en la entrega de las vacunas Sputnik V, al afirmar que los contratos firmados para la adquisición de dosis eximen de reclamos ante los eventuales incumplimientos.
Según se informó oficialmente, unas 5 millones de vacunas tendrían que haber llegado a la Argentina por el compromiso asumido por el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF). Sin embargo, el acuerdo aún no pudo concretarse.
Vizzotti precisó en diálogo con radio La Red que “a todos los proveedores, en todos los contratos” se les exime de responsabilidad por demoras en la producción de vacunas contra el COVID-19.
“En todo el mundo los productores de vacunas nos mandan un cronograma, que son una estimación”, apuntó la viceministra de Salud. “Cuando en los últimos meses del año pasado nos mandan los contratos, la entrega era en base a estimaciones en función de los resultados de la fase 3 y la escalada de producción”, agregó.
La funcionaria justificó los retrasos en el proceso de elaboración y entrega de vacunas contra el coronavirus porque “no es una cosa sencilla” y que se agravó con “el cuello de botella” en la fabricación ante la demanda global.
“Se está haciendo todo al mismo tiempo: coordinar los ensayos clínicos, producir a riesgo y escalar la producción tiene procesos de evaluación. Todos los primeros procesos de producción tiene una complejidad inmensa”, consideró.
El Gobierno nacional tenía previsto vacunar 5 millones de personas en enero y sumar otras 5 millones en febrero. Así lo había anticipado el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, en base a los acuerdos firmados por la provisión de la vacuna rusa. Infobae