Unidos por el Dolor: sacar fuerzas de la tragedia y formar una red de contención para los que perdieron un ser querido
Unidos por el Dolor nació al fragor de una tragedia personal de dos los integrantes de esta fundación, Alberto Gaúna y su mujer, quienes perdieron a su hijo Enzo Gaúna, un 8 de agosto de 2015.

La Fundación Unidos por el Dolor, constituida por familias tras una tragedia de perder un ser amado, nace del dolor y tras un hecho de tránsito donde el hijo de su presidente, Alberto Gaúna, es víctima fatal un 8 de agosto de 2015. "Desde ese momento decidimos junto a otras familias que también pasaban por la misma tragedia, crear esta ONG, como lleva el nombre Unidos por el Dolor, después de varios años hemos conseguido personería jurídica", cuenta.
"El objeto de la fundación es el acompañamiento, asesoramiento, contención a las familias que también transitan una tragedia de perder un ser amado o mejor dicho, que te arrebaten un ser amado, en un primer momento fuimos familiares de víctimas de homicidio viales y después se nos sumaron familiares de víctimas de otros tipos de delitos de desaparecidos, homicidio, abuso sexual, hoy en día también tuvimos casos de victimas de adicciones, el asesoramiento gratuito y no patrocinio, lo hacemos con la colaboración del doctor Jorge Pessolano, quien también lleva muchos casos de la Fundación por la confianza y profesionalismo", narra Alberto. "Contamos de forma gratuita con la asistencia psicológica desde la Unidad de Víctimas de Siniestros Viales que pertenece al Ministerio de Gobierno, se creó tras el pedido de familiares, también hemos conseguido hace muy poco la colaboración de una asociación de peritos accidentológicos, esto es desde el trabajo en red regional al que pertenecemos como ONG (Red Norte Grande). Hemos acompañamos a muchas familias, desde el momento más crítico, desde llegar en el momento de velar a sus seres amados, si bien solo podemos dar nuestras pocas palabras de consuelo, nos predisponemos a ayudar en lo que podamos, y es así que pasa un tiempo y la familia se contacta".
Cuenta Alberto que "cuando pasas por un hecho así jamás te imaginas lo que te espera de peregrinar en la justicia, allí lo intento en primer lugar, siempre es acercar a la familia a que hablen con los jueces, con los fiscales de la causa, para que los operadores de la justicia entiendan que tras un expediente existe una familia destrozada y esperanzada en justicia. Si bien justicia nunca vamos a conseguir, porque justicia significa dar a cada uno lo que le corresponde, y jamás nos devolverán nuestros ángeles, pero necesitamos que esa persona pague por lo que cometió, que haya una condena efectiva".
"En este tiempo hemos llegado a varios juicios, pero lamentablemente son más los que no llegan ,y acá quiero enfatizar porqué ocurre esto y muchas veces, y la mayoría es por un abogado "caracho", como denunciamos nosotros, que hacen vencer plazos, presentaciones que te llevan a perder la causa. Otras veces tiene que ver con el tiempo y la burocracia judicial que desanima a los familiares; y otras muy tristes, de familia de bajos recursos que hoy en día aún más difícil de poder pagar un abogado, un perito, fotocopiar un expediente", agrega.
"Desde la fundación también realizamos campañas, nos invitan desde institución educativas para dar charlas y es muy bueno porque lo que se genera es un conversatorio entre los jóvenes. También realizamos concientización en los festivales, y cada vez que somos invitados por el Director de Seguridad Vial de la Provincia Fernando Inchausti y la Policía Vial", cuenta.
Ley Alcohol Cero
Alberto y su fundación, junto a otras ONG participaron activamente de la campaña y la lucha para conseguir que el Congreso sancionara la ley de Alcohol Cero al volante a nivel nacional, y además, estuvieron involucrados al momento de conseguir que tanto la Provincia como el Ejecutivo Municipal de la ciudad de Formosa, adhieran a esta ley.
"Ley Alcohol cero, después de mucho tiempo fue posible, es un proyecto que desde hace más de 20 años era pedido por familias de víctimas, este último proyecto nació desde el Grupo 1, Justicia y Derechos Humanos, del Comité Consultivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, es un grupo constituido por oenegés de todo el país, de familiares que trabajamos en proyectos referidos a la seguridad vial", cuenta Alberto.
"El proyecto fue presentado por el director ejecutivo de la ANSV que en ese momento era Pablo Carignianno y desde ese momento comenzó el impulso desde cada rincón del país, cada familiar desde sus provincias tras sus legisladores, realmente fue difícil contra el lobby de empresarios vitivinícolas, que se oponían y de legisladores que rechazaban o estaban en contra, nos pasó con algunos legisladores de la oposición en Formosa", explicó.
"Por esta ley vamos a estar siempre agradecidos a nuestros legisladores justicialistas que la pelearon, especialmente en el Senado donde más costó, sobre todo a la senadora María "Tessi" González, quien nos ayudó para estar allí en ese momento.
En la provincia como presidente de la fundación tuve una oportunidad de pedir al gobernador por la ley en Formosa, y su respuesta fue que ni bien salía la ley nacional nos adherimos y así fue, fuimos la primera provincia en adherir.