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comentario político local

Ahora, la culpa la tiene Milei

Los formoseños deben prepararse para la peor etapa de Insfrán, que ha iniciado con persecución y despidos pero como en pandemia, la suma del poder del feudal, solo puede empeorar, nunca mejorar tratando de rescatar las instituciones de la democracia.

Parte de los 150 cesanteados. La escasa participación de los quejosos, hace presumir, que el resto de los despedidos, tienen miedos, conveniencias o eran “ñoquis”.Crédito: web

150 son los despidos inoportunos y muchos empleados públicos, con de más de 20 años de antigüedad en esa situación de precariedad, siendo otro de los postulado ya instaurados del gobernador, Gildo Insfrán. "Inestabilidad para todos y todas" se suma a los pilares del feudalismo pejotista de los "encerramos a todos y todas" o no le damos el título de propiedad "a todos y todas".

Son muchos los casos que fueron brutalmente desvinculados sin aviso previo o causa, cuando sencillamente no los dejaron entrar al arrancar la semana, ni aún indispensables para el servicio donde se desempeñaban, pero a la hora de la represalia pos electoral, al barbado lagunense, nada la importa y aplica el "látigo".

Lo que menos importa es la salud

Un hospital se quedó sin el enfermero más antiguo y más experimentado en la sala de emergencia, el otro hospital sin el auxiliar con muchos años en la sala de cirugía. El hospital de la Madre y El Niño sin una médica, con la falta de profesionales que existen en la provincia, algunos no aceptan trabajar por los despreciables sueldos.

El Distrital 8 sin bioquímica, el Evita sin otro profesional y así fueron sumando a la primera oleada dentro de la administración pública de la represalia tomada contra aquellos que osaron publicar en sus redes sociales su apoyo al actual presidente, Javier Milei.

No había razón alguna para no renovarles el contrato de manera automática como a los miles de empleados públicos que tienen la misma relación precaria con el estado. 

La mayoría son contratados, jornalizados y en varias formas de "negreo" que es imposible conocerlas todas en 30 años del mismo gobierno.

Pero los gremios aplaudidores lo han permitido, los legisladores, los jueces lo han permitido, los militantes e inclusive cada uno de los empleados (antes de que les tocara) lo ha permitido, como  ha permitido la mayoría que ratifica a Insfrán en cada reelección con el voto, para que este haga uso y abuso de la suma  del poder.

Los defensores de trabajadores

Antes de mostrar su simpatía por la candidatura del libertario, muchos de esos 150 habrán estado del lado del feudal, cuando volvió una cárcel la provincia en razón de la pandemia hasta que unos pocos jóvenes, iniciaron la mayor rebelión de trabajadores en los últimos 40 años en una sociedad absolutamente anestesiada. La policía reprimió salvajemente y ningún juez actuó en consecuencia. Eso también fue permitido con violaciones a los DDHH. incluido en el paquete e igual de olvidado a posteriori.

No se puede tener una mirada retrospectiva y calcular hace cuantos años se violan todas las leyes laborales que involucran a parte o la totalidad de los empleados públicos de la provincia de Formosa e inclusive las que involucran a los empleados privados.

Nadie en esta provincia tiene garantizado el derecho al trabajo, (mucho menos los estatales), salvo la militancia sumisa, y si el conflicto no se plantea con el "aparato" del quinto piso, el aparato partidario y la telaraña de billetes de los recursos públicos, no hay salida para  el conflicto por la denegación de justicia, con ley de emergencia económica incluida.

¡Ah! Pero el óctuple gobernador no se contamina las manos, para que no relacionen los vacíos postulados del peronismo y la protección los trabajadores con la venganza de dejar sin trabajo a los enfermeros y médicos que le pusieron el cuerpo a la pandemia.

El no echó a los empleados de su gobierno, no puso la cara, solo está para los actos positivos y mimado por un ejército de adulones y matones con uniforme. Tampoco lo hizo el Ministro de Desarrollo Humano, Aníbal Gómez, quien todos los años lo van a echar porque el mejor sistema de salud, resulta desastroso al punto que cuesta vidas y sin embargo sigue en la cartera igual que el modelo de perpetuidad.

Las redes delatan

Mandaron a una funcionaria de minúscula categoría a poner su presencia por ellos para dejar sin trabajo a 150 empleados, explicándoles de la manera más natural posible que, solo se les rescindió el contrato después de 10 o 20 años y que se quedaron sin trabajo como algo habitual de todos los días.

Pero la parte más patética de la historia, se viralizó a través de las redes de una administradora del Hospital, encargada de espiar las los muros personales, en donde el operativo limpieza tenía una razón específica. Todos los que publicaron en sus redes, estados o "historias" a favor de la campaña del presidente Milei o en contra del candidato de UxP, Sergio Massa ahora serían despedidos, según argumentaba este personal para nada calificado, que cerraba el mensaje afirmado que todo había sido "por el DNU del presidente Milei".

El miedo y la conveniencia

Pero luego de la exasperación en la opinión pública, una vez socializado el escándalo, lo curioso fue que solo 15 o 20 personas salieron a reclamar por sus puestos de trabajo. No fueron 100, no fueron 120 y menos 150.

Es obvio que la máquina del miedo de Gildo, tiene varias generaciones de combustible espontáneo de una sociedad absolutamente sometida, aún en las peores situaciones de violación de derechos. No hay reacción, no hay protesta numerosa, no hay sino publicaciones en las redes, las noticias en los diarios y de nuevo el silencio de todos los días.

Según fuentes confiables, el gobierno de Insfrán tiene planificado "echar" a 1700 personas y ha iniciado como alecciona siempre, oleadas de abuso de poder, una detrás de la otra, cada una más fuerte pero empezando de a poco, como en la pandemia, hasta desatar el aparato de oprimir al 100% sobre los trabajadores.

La culpa tiene el voto violeta

¿Cuál es el motivo? Primero la venganza por el voto violeta y segundo, sacar provecho al ajuste a nivel nacional y reformatear una estallada planta de trabajadores. Hay que hacer lugar para los militantes que llegaron después de los que trabajaban y después de los ñoquis. Por algún sitio hay que empezar y cargarle todo a Milei.

El eterno residente del quinto piso, no quiere justificar su ajuste, dejando que a la "monarquía gildista" no le afecte  el mal momento económico de la provincia.

Recortar para que a ellos no les falte y mientras tanto subir a todo volumen, la usina de propaganda pagada por todos para que los militantes locales, se quejen por el desfinanciamiento del transporte cuando los colectivos son pésimos hace años, el desfinanciamiento de la energía, cuando la empresa es una empresa estatal con accionistas funcionarios de varios ministerios. El desfinanciamiento de la cultura como de tantas otras cuevas de militantes para distraer el daño que se plantea a nivel local. 

Protestar porque se vende la Patagonia, mientras los terrenos fiscales en Formosa se la quedan los amigos.

La mejor forma de ajustar de entrecasa es tener a los formoseños mirando por la ventana. Distraídos en cualquier lado.

Una diferente época

Insfrán inicia el peor y el último de sus mandatos. Cuatro años de persecución, cuatro años de falta de fondos nacionales y sin producción local. Sin ideas para irse de manera decorosa del poder y sin aceptar consejos de nadie.

El lagunense, no se destaca por  permitir el ingreso de las inversiones privadas y tratar mejorar el clima de negocios para crear fuente laborales. Su habilidad siempre se destaco por su obediencia a la casa rosada (20 años de kirchnerismo), y principalmente en el negocio de las obras públicas a través de giros de la nación y de los ATN.

No en vano agradeció públicamente , a quien más lo benefició; el condenado judicialmente ex ministro de Planificación y Obras Publicas del kirchnerismo, Julio de Vido. Desde una tribuna, supo exclamar, antes sus obsecuentes seguidores, "Gracias Julio…", en una clara demostración de haber sido muy beneficiado con las grandes obras y los reembolsos, que se decidían en la UCAP, oficina con mucho poder, en el edificio de la calle Belgrano.

Los formoseños deben prepararse para la peor etapa de Insfrán, que ha iniciado con persecución y despidos pero como en pandemia, la suma del poder del feudal, solo puede empeorar, nunca mejorar tratando de rescatar las instituciones de la democracia.

Hospital Evita: Parte de los 150 cesanteados. La escasa participación de los quejosos, hace presumir, que el resto de los despedidos, tienen miedos, conveniencias o eran "ñoquis".