Obligados a soportarse
El dinero no alcanza, los sueldos son bajos y destruidos por la inflación, y ninguna obra pública, aún la más costosa, lograra cambiar el hecho de que cada vez hay más formoseños atravesando la línea de la pobreza, y muy cercados por la indigencia.

A poco más de un mes de las PASO en todo el país, que servirá a modo de encuesta fehaciente de por cuanto seria la derrota del kirchnerismo y que candidato de Juntos por el Cambio irá a disputar la presidencia, la gente manifiesta en Formosa, una apatía general.
Según datos recabados por un portal local que realizó una encuesta para anticipar una intención de votos, al formoseño no le atrae el hecho de tener que ir de nuevo a las urnas tan solo para definir candidatos.
Considera que hay temas mucho más importantes como los precios y los salarios, además se siente frustrado porque a partir de la aplastante victoria del gildismo, los sueldos y los problemas de todos los días desaparecieron de la agenda de todos, inclusive de la oposición.
La realidad sigue más complicada que antes de las elecciones y aunque en provincias como Corrientes han otorgado un aumento de cerca de un 25% con mucho mejores salarios que los empleados públicos de Formosa (después de ganar las elecciones), Insfrán elige el camino "sordo" de la obra pública y se olvida el alto endeudamiento del estatal formoseño.
El sueldo de bolsillo promedio de un agente estatal no cubre la canasta básica, y para las estadísticas, sigue siendo pobre, aun teniendo un trabajo estable, sin posibilidades de que el escalafón, le permita escalar alguna categoría.
Vamos mal, pero estamos bien
Aquellos que todavía ojean un diario de papel y la generación que lee las noticias por los celulares, se fastidian por las interpretaciones manipuladas de los funcionarios del gobierno de Insfrán que toman todos los datos positivos de la economía local, como directamente relacionados a una mejoría en la calidad de vida de los ciudadanos.
El crecimiento en la venta de los supermercados en Formosa, está directamente relacionado a que las familias se vuelcan a abastecerse de alimentos y deja de comprar otros productos que antes consumían periódicamente o estos, sencillamente van al contrabando. El crecimiento de la venta de combustible también.
El billete de mil pesos que antes adquiría lo que se consumía de manera diaria, dejó de alcanzar y es necesario utilizar varios billetes de esos para comprar un solo producto. La emisión muestra el deterioro imparable del poder adquisitivo y hasta el nuevo billete de dos mil pesos da la sensación de ser más pequeño ¿Vendrá devaluado? Algo es seguro, tendrá un deterioro de más del 50% hasta fin de año y de más del 100% en un año.
Los vendedores de autos o motos (aquellos que todavía venden algo), se solidarizan con sus clientes y les sugieren, a los que pueden, que compren de contado, porque los financiamientos bancarios más cortos a 12 meses tienen más del 100% de intereses y si van por un crédito UVA, sería como sellar una expiración anticipada de cualquier economía familiar.
Otro de los indicadores de los cuales, el óctuple gobernador electo, se ufana a través de sus funcionarios, es el crecimiento del empleo privado en la provincia siendo Formosa, la que mejores indicadores en este sentido muestra. Pero ¿Cómo? Si cada vez se cierran más comercios, el consumo ha bajado a niveles que provocan alarma en PYMES con muchos empleados.
La única verdad no es el relato del modelo, porque el desempeño del mercado laboral de cada provincia está directamente relacionado con la composición de su matriz productiva y con la administración de sus recursos.
Obras paralizadas
Si uno empieza a desguazar la matriz productiva de la provincia, a partir de la directa intervención del estado en todos los procesos, no hay diversificación en la creación del empleo registrado. En el ámbito privado la mayor parte de los asalariados registrados se produjeron por directa consecuencia de la obra pública. Insfrán es uno de los gobernadores que más dinero recibe en este rubro y es en esta actividad donde se registra la mayor parte de las estadísticas preferidas por el reelecto gobernador.
Pero lo cierto es que el eterno residente del quinto piso, no podrá mantener mucho más la ficción del flujo de efectivo eterno de los amigos del gobierno nacional porque esta cuestión se nota en varias obras de envergadura que no reciben los pagos de certificados ya muy atrasados. Sin lugar a dudas, seguramente encontrará hacia donde desviar la vista de la obra paralizada y ya falta poco para echarle la culpa al gobierno que asumirá en diciembre.
Hoy anuncia más convenios a futuro y obras que se iniciarán, que probablemente queden detenidas en el tiempo. No se habla más de la finalización de la Autovía de la ruta 11 hasta Mansilla pero, por suerte, se está a punto de inaugurar (después de más de 15 años), el puente sobre elevado sobre la avenida Kirchner.
Tampoco dice nada del acto en donde el gobierno nacional, llevará la evocación de la independencia nacional, para inaugurar un tramo del Gasoducto Néstor Kirchner. Muy lejos quedó el Gasoducto del Norte, hoy paralizado y sin posibilidad de continuar los tramos faltantes, sigue siendo una promesa incumplida (pese a los millones de dólares dilapidados), en los 20 años de los gobierno Kirchneristas y casi 30 del gildismo.
Vuelve la campaña del miedo
Como no puede con su genio, este sábado en el operativo Por Nuestra Gente Todo, Insfrán pronosticó un "derramamiento de sangre" si no gana el kirchnerismo. Algo que suena tan presuntuoso como irresponsable.
En un párrafo de su discurso, aseguró que: "Yo dije hace pocos días que el pueblo formoseño y el pueblo argentino es sabio y sobre todo memorioso. Hace cuatro años tuvimos del 2015 al 2019, un gobierno que es lo mismo que nos están ofreciendo ahora con distintos ropajes pero en el fondo es la misma ideología".
Dijo además que: "Pero esta ideología viene con mayor crueldad porque todo lo que ellos dicen si quieren aplicar en el pueblo argentino va a ser con derramamiento de sangre".
Y cerró explicando que: "Porque va a ser insostenible cuando uno ve los mensajes que hablan del orden. El orden tiene que existir pero el orden puesto a fuego, impuesto a fuego, no sirve. Eso es privilegio para algunos y el sufrimiento para la mayoría del pueblo argentino".
Aquí "no pasó nada"
Con original amnesia, tuvo que forzar un poco el argumento, porque todavía quedan los ecos de las granadas de gas y las balas de goma, de la brutal represión del 5 de marzo a los formoseños, donde ocurrieron hechos similares a los de Jujuy, pero con complicidad y el apoyo del actual gobierno nacional.
El eterno gobernador de Formosa, incentiva a los militantes a trabajar por un nuevo triunfo del peronismo, que hoy se hace cuesta arriba. Ahora se olvidó que debe gobernar cuatro años más para sus comprovincianos, relegar por un tiempo de la política nacional y dedicarse a mejorar la economía local, porque más allá de su rere reelección, los problemas de la gente siguen siendo los mismos o peores.
El dinero no alcanza, los sueldos son bajos y destruidos por la inflación, y ninguna obra pública, aún la más costosa, lograra cambiar el hecho de que cada vez hay más formoseños atravesando la línea de la pobreza, y muy cercado por la indigencia.