La principal acusada del asesinato de una maestra en Salta admitió que estaba drogada y alcoholizada
En el inicio del juicio por los hechos ocurridos en la casa de la docente en el 2020, la principal sospechosa apuntó contra otros responsables.

El hecho ocurrió en abril del 2020, cuando la maestra Rosa Sulca fue apuñalada en su casa y la principal sospechosa admitió hoy, durante la primera jornada del juicio, que el día del ataque estaba "drogada y alcoholizada", al tiempo que señaló a otra persona como autor del homicidio.
El caso trascendió porque la docente había llegado a pedir ayuda al 911 antes de fallecer. En ese contexto, fuentes judiciales informaron que S.A.S., quien al momento del asesinato era menor de edad, fue la única de los nueve imputados que declaró en el la audiencia inicial del debate.
Tras reconocer que estaba "drogada y alcoholizada" el día del crimen, la acusada aceptó responder preguntas de las partes y dio una versión distinta de lo sucedido, al tiempo que señaló como autor del crimen a un hombre que fue sobreseído durante la investigación.
La imputada dijo que conocía a Sulca (48) porque había sido maestra de su hermana y era amiga de su madre.
El debate está a cargo de la Sala VI del Tribunal de Juicio de Salta, presidida por la jueza Mónica Mukdsi e integrada por los vocales José Luis Riera y Guillermo Pereyra, y se estima que se extenderá hasta el 24 de mayo próximo.
Los hechos que derivaron en las 17 puñaladas
El hecho que se ventila en este debate ocurrió el 28 de abril de 2020, en el barrio Villa Mitre, de la zona sudeste de la capital salteña, donde la víctima, que era maestra, fue golpeada y lesionada con un cuchillo en su propia casa.
Durante el ataque, la mujer llegó a llamar al Sistema de Emergencia 911 para pedir ayuda y alertó a la operadora que la estaban "matando", incluso alcanzó a dar el domicilio, pero de inmediato otra voz femenina se interpuso en la llamada y dijo que se trataba de su tía, que actuaba así porque estaba bajo los efectos de psicofármacos, y cortó la comunicación.
La mujer, que recibió 17 puñaladas en la zona del tórax, además de golpes y heridas contusas abiertas y punzocortantes, fue hallada sin vida en el interior de su casa.
En tanto, Sanhueso y Vizgarra son los efectivos policiales que acudieron al domicilio de la damnificada, después de la comunicación con el 911, pero se retiraron debido a que llamaron a la puerta y nadie les respondió.
Por el Ministerio Público interviene en el juicio el fiscal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas (UGAP), Leandro Joaquín Flores, mientras que por la parte querellante lo hacen los abogados Pablo Tort y Juan Pablo Ochoa, de la Fundación Cintia Fernández.