Pablo Ortiz, un formoseño suelto en Paraguay, presenta su segundo disco Raíz con grandes alusiones a la provincia

El Comercial dialogó con Pablo Ortiz, un músico y compositor nacido en Formosa y que está radicado hace 22 años en Asunción, donde estudió y se formó; también vivió 7 años en Barcelona, España, donde estudió la Licenciatura en Educación Musical e hizo la carrera de Canto y Guitarra Clásica, regresó al Paraguay hace 14 años y es donde vive y tiene una academia de música que es su mayor sustento para su vida y su carrera como artista.

Ante la pregunta de si se puede vivir de la música, Pablo dijo que "sí, se puede, pero obviamente hay que ser multifacético en este mundo de la música, en mi caso yo lo complemento con la docencia, pero la idea es que en algún momento yo pueda vivir de mi parte artística, y dejar la academia en manos de profesionales que la lleven adelante y solo dirigir".

Actualmente en la academia Pablo cuenta que tiene aproximadamente unos 38 alumnos en las distintas áreas de aprendizaje como piano, canto, ukelele, guitarra, entre otros; pero ha llegado a tener picos de hasta 60 alumnos.

Respecto a la academia, el artista comentó que "me lleva mucho tiempo, por eso no tengo pensado a menos en el corto plazo, volver a Formosa como para instalarme; pero sí me encanta participar de los eventos, me gustaría ser convocado para los grandes festivales, hacerme conocer y conocer la música que hago".

De raíz formoseña

Pablo Ortiz tiene un disco de estudio ya editado que se llama Ya no quiero esperar más, que contiene 8 canciones, cuya letra y música le pertecen. "Es un disco estilo Pop-Rock, y cuenta con la colaboración de grandes artistas, como el caso de la canción Tu amor lo guardé, que fue nombrada la mejor canción de rock nacional en Paraguay en el 2021, lo hice junto a Rolando Chaparro que es un reconocido músico en el país; también conté con la colaboración de Dizzy Espeche, que es guitarrista de Coti, y trabajó con Fito Paéz también, estuvo Javier Pantoni, que es un productor formoseño", dijo.

Y ahora está lanzando su segundo disco, Raíz, que al igual que el anterior tiene 8 canciones. "Hablo mucho de Formosa, de hecho la canción Raíz que es la que le da nombre al disco es una litoraleña, muy característica de acá, hay imágenes de Laguna Oca, y ahora junto a Lisbeth (su pareja) nos estamos yendo para Buenos Aires donde vamos a grabar el tema que cierra el disco que se llama Tiempo al tiempo. Ahí estamos trabajando con un equipo íntegramente formoseño: está Carlos López que es un productor formoseño, fue mi primer productor musical, están Miguel Pereyro en el piano y Federico Pereyro en el bandoneón; y la producción audiovisual estará a cargo de David Lescano, todos formoseños que nos van acompañar en este hermosa aventura", contó.

Lisbeth, la compañera ideal

Por otro lado, a Pablo la acompaña su pareja, la también artista Lisbeth (Norma Fridman) quien es cantante y compositora; y que junto a su pareja está promocionando su carrera musical.

"Vengo con la promoción de Quererte bonito que es un cover de Sebastián Yatra que cantamos con Pablo, a mí durante la pandemia un productor musical me descubrió y fue así que me pude animar a hacer esto que me encanta, y voy cumpliendo mi sueño de a poco", contó.

Lisbeth como se da a conocer estuvo viviendo 14 años en Europa y tiene familiares en Argentina, de hecho, contó que su padre es formoseño y que gracias a Pablo ha podido venir a conocer la tierra de sus raíces. "Me encanta Formosa, me gustaría mucho poder hacer cosas acá, generar contactos y poder hacer algo", dijo.

La artista va por su cuarta canción y el estilo elegido de momento es el Pop nostálgico, aunque, consciente de los tiempos que corren, no tiene problema en experimentar en los nuevos géneros y adaptarse a lo que la industria le demande.

"Una de las canciones que lanzamos en simultáneo con Pablo el pasado 14 de febrero por el Día de los Enamorados fue Nada es casualidad que se la dediqué a él, está pensada e inspirada en mi historia con él, y la idea es que la gente la pueda tomar, sentirla y hacerla propia para que la puedan disfrutar y dedicársela a sus seres queridos", explicó.

Emergentes

Si bien ambos artistas son profesionales y llevan tiempo con lo que hacen, entienden que para el público mainstream, son emergentes y por tanto, deben lidiar con esa presión.

Considerando que, incluso a los grandes artistas consagrados y conocidos mundialmente, el público los cuestiona; les preguntamos cómo lidian con eso.

Pablo dijo: "Hasta ahora no me han tirado nada. Debo decir que el público paraguayo es muy exigente, pero es un buen público, es buen oyente. Me encantaría poder testear con más público, pero por ejemplo, el público de Formosa también es muy bueno, y si hasta ahora no me han tirado nada, creo que estamos yendo por el camino correcto".

Por su parte, Lisbeth sostuvo que "soy muy exigente conmigo misma, y como tengo ya una trayectoria en los medios, estando detrás y delante de las cámaras, es como que entré a este mundo ya con el pie derecho, entonces la gente por ahí dice "ah, ahora canta, y canta bien, no desafina; y si defina está bien también", entonces es como que eso me da motivos, y además disfruto mucho haciendo lo que hago".

Ambos coinciden en que han aprendido a entender la comunicación con el público.