Habló el jugador que agredió brutalmente a una árbitra y fue expulsado de su club: "Le pido perdón"
La causa contra Cristian Tirone, que declaró ante un fiscal, podría incluso llegar a juicio y, en ese caso, sería dirimido por una jueza. Está detenido desde el domingo y permanecerá en esa condición.

Cristian Ariel Tirone, el jugador de Deportivo Garmense que agredió brutalmente a una árbitra el último fin de semana, se presentó en su indagatoria ante el ayudante fiscal de Gonzales Chaves, Gabriel Lopazzo, y si bien eligió no declarar, pidió perdón por su salvaje acto.
"Está arrepentido y pidió perdón a la jueza (en referencia a la árbitra) y a la gente", contaron a TN fuentes de la fiscalía respecto de la posición de Tirone ante la Justicia. Cabe recordar que desde lo ocurrido, el futbolista se encuentra detenido acusado de golpear a la árbitro Dalma Magali Cortaldi. El delito por el que se lo señala es el de lesiones agravadas por alevosía por la condición de mujer de la víctima y por haberse cometido durante la realización de un espectáculo deportivo en concurso ideal.
Cristian Tirone, jugador de 34 años, es oriundo de la localidad De la Garma, cercana a Tres Arroyos, y continuará en calidad de aprehendido por el momento, hasta que se recolecten algunos otros elementos pedidos por la fiscalía.
La familia Tirone, atravesada por una reacción incomprensible
Cristian Tirone se fue de la cancha directamente escoltado por agentes policiales. El recinto estaba completo porque a continuación del partido de la tercera categoría en el que se registró la brutal agresión, se iba a jugar el de Primera, aquel que generaba la atención de todo un pueblo y que, por lo ocurrido, terminó por suspenderse.
Lo curioso, si cabe el adjetivo para esta historia, es que otro de los jugadores del equipo del agresor, es hermano del mismo y hoy vive en carne propia las consecuencias de semejante acción.
Por lo ponto, desde la fiscalía cuentan que Tirone "se mostró compungido" y que después de pasar toda la noche en condición de aprehendido, "no había tomado conciencia de la repercusión que tuvo su acción".