Con funcionarias paradas cual estatuas, sin la intervención de ninguna: Insfrán fue el único que habló por las mujeres en su día
El gobernador Gildo Insfrán fue el único que habló en un acto en el que se suponía, se estaba homenajeando a las mujeres por su día. En el escenario lo acompañaron funcionarias, pero ninguna intervino. Todas fueron a escuchar a un hombre que solo dijo verdades de Perogrullo.

El "homenaje" a la mujer formoseña –que debe leerse más bien, como a la mujer gildista- se convirtió en un acto político, quizás de lanzamiento para una próxima reelección de Gildo Insfrán, quien fue el único que habló por ellas este martes por la noche en el estadio Carlos Castañeda. Aunque en el escenario lo acompañaron funcionarias, todas se quedaron ahí paraditas como estatuas, escuchando las verdades obvias del gobernador: "La violencia de género no se perdona", "Si una vez les pegó o les levantó la mano, salgan de ahí", "Uno puede tener desavenencias pero eso no nos habilita a ejercer violencia", y otras frases clichés, verdades de Perogrullo que solo sirvieron para rellenar el espacio que podría haber sido aprovechado por las mujeres, las verdaderas protagonistas.
Pero, claro, ¿cómo podría alguna subirse y reclamarle por ejemplo por la igualdad laboral en el Estado? ¿Cómo podría alguna víctima de violencia de género decir que hay encubrimiento en algunos estamentos y que la Secretaría de la Mujer no funciona? ¿Cómo podría alguna cuestionar que el 5 de marzo del año 2021 había mujeres que fueron salvajemente agredidas por la Policía del gobernador? Esas mujeres, obviamente no estaban invitadas al "homenaje".
Recordó Insfrán que el reencuentro tras tres años fue posible gracias a un trabajo mancomunado de la sociedad formoseña en la lucha contra el coronavirus.
Valoró el rol de la mujer durante la pandemia al ponerse al frente de los cuidados de su familia, comunidad y pueblo. "Por todo esto siento un inmenso orgullo de la mujer formoseña, pero sería injusto no decir que las mujeres trabajadoras del sistema de salud, de seguridad, de todos los organismos provinciales, municipales que estuvieron presentes de cualquier manera, ayudando a nuestros comprovincianos que estaban enfermos o que eran contactos estrechos, acomodando los Centros de asistencia sanitaria, no tuvieron problemas, ahí estuvieron" reflexionó.
Tuvo elogios también para los y las militantes de la salud y de la vida, que fueron protagonistas de la "campaña de vacunación más grande de nuestra historia, cómo no sentir ese orgullo de pertenecer a esta tierra, si Formosa es la provincia mayor inmunizada del país, en primeras, segundas y terceras dosis".
Y como no podía ser de otra manera, tuvo que traer a cuento a sus "próceres" del peronismo, y la citó a Eva Duarte de Perón: "Evita decía que no quiero el feminismo de Inglaterra, porque ellos van contra los hombres, yo quiero el feminismo que trabaja con los hombres, codo a codo, para lograr una Patria más grande, más justa, y más libre.", sí, la misma mujer que decía el único al que ella se debía era a Juan Perón, casi hablando como si se tratase de una deidad.
Habló de sus escuelas…
Al enumerar las conquistas del género, señaló que desde que ocupa la titularidad del Poder Ejecutivo Provincial fueron inaugurados 1.419 edificios escolares a lo largo y ancho de la provincia, posibilitando así la concurrencia a clases de chicos y chicas que antes quedaban imposibilitados por cuestiones de distancias y también culturales.
"Hoy pasa que la mayor matrícula de las escuelas secundarias y terciarias son las mujeres. Esto es justicia social. Sé que hay muchas injusticias por derribar, pero juntos lo haremos, todos unidos" expresó.
"Les entregué mi corazón"
Insfrán se refirió a quienes cuestionan el acto por el Día de la Mujer y señaló que no se trata un acto suyo, sino de la mujer formoseña –aunque solo habló él-, a quien le entregó su corazón. "Hoy ya no tengo más nada que entregarles, solamente mi vocación de servicio, porque ustedes lo supieron cuidar muy bien. Mi corazón funciona extraordinariamente así me lo dijo mi cardióloga" (sic).
Asimismo ratificó su decisión de consagrarlas como guardianas del Modelo Formoseño –es decir, a las mujeres gildistas- al señalar que es en quienes confía, porque se lo demostraron cabalmente.
"La diferencia que tenemos con esos que dicen luchar, es que nuestra lucha es en paz, con amor. Aquellos que se encapsulan y se redoblan en el odio, no podrán jamás contra nosotros porque en nuestro jardín cultivamos el amor, que tiene un rostro, para mí el rostro de mujer, de mujer formoseña" (NdR: siempre y cuando esté en las filas de su partido y con su lineamiento político) enfatizó.
Sus "consejos"
Al brindar una serie de consejos a la concurrencia, Insfrán les pidió que "no dejen que un hombre no les diga que son bonitas, que son las flores, que son lo mejor de la creación, porque o si no se perdería la esencia de lo que son" tras señalar que su madre Pochó lo crió en el respeto hacia las mujeres.
Y seguido a ello les "recitó" unos versos mal improvisados que provocaron los suspiros de las presentes como si enfrente estuviera una figura de talla mundial del mundo de la música pop o rock.
Eso fue el acto de Insfrán por el día de la mujer, resaltar una vez más su figura y recordarles que "o es él, o no es nadie más".